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Al virrey de la Nueva España
que procure enviar a estas islas
algunos maestros de fábricas de
galeones.

El rey. Márquez de Leuta
de [La Adrada] conde de Baños pariente a
quien he proveído por mi gobernador y capitán
general de la Nueva España y presidente
de mi audiencia real de ella, o
a la persona, o personas, que la gobernare
en memorial que presentado en mi consejo
real de las Indias. Máximo Sola de
la Compañía de Jesús, ha representado los
muchos aprietos en que se hallan las islas
Filipinas (de donde ha venido por
procurador general de ellas) nacidos de
diferentes causas, y entre ellas la falta
de maestros peritos en las fábricas de galeones
de que sean ocasionado notables gastos
a mi real hacienda y perdidas muy
considerables a los vecinos de dichas islas,
porque por falta de inteligencia
en la materia, han salido erradas las fábricas
de diferentes galeones. Por lo cual,
ni pueden hacer viaje ni ser de provecho
alguno como se había experimentado
aquellos años. Y que aunque por
cédula mía tengo mandado a la casa de la
contratación de Sevilla enviase