Digitizing Peru's Print Revolution

Á LOS AREQUIPEÑOS.

UNA larga serie de calamidades ha sido, ¡Arequipeños! bien lo sabéis, nuestra vida política. Quisísteis vosotros conjurarlas, cuando aun no habian tomado tanto cuerpo; vuestros esfuerzos fueron vanos, pero el mal se ha hecho de tal bulto que ya es visible para todo el que no está obsecado por la llama voràz de las malas pasiones. No os hablo de la agitada agonía en que habéis vivido, de la miseria que os abruma, de la corrupcion que con la doctrina y el ejemplo se propaga: solo os recuerdo que ya se habia castigado y ultrajado como crimen el sentimiento del honor, noble estímulo de las buenas acciones; ya se habia violado la santidad del derecho, condicion inherente a las sociedades humanas; ya se habia vilipendiado y casi extinguido el principio de la autoridad, base fundamental de la libertad y del orden, ó mejor dicho de la justicia y de la paz; y que, no contentos con haber adelantado tanto su obra de destruccion, ya osaban los malos descargar recios y repetidos golpes sobre los indestructibles muros de la Iglesia de Dios, depositaria de sus santos dogmas y de su moral divina, en la cual estriba la estabilidad y el poder de las Naciones, así como el bienestar y la felicidad de los individuos.

Vosotros no podíais consentir en que esa obra de iniquidad se consumára. Yo supe, allá en la tierra venturosa que me habia dado asilo, vuestra firme resolucion de oponeros al torrente que amenazaba destruir el órden social y la sagrada religion de nuestros padres: supe que en el conflicto me invocábais, y he venido presuroso á ofreceros mi débil cooperacion. Mintieron los que os aseguraban que yo no acudiria á vuestro llamamiento: vuestra voz es muy grata á mis oidos y resuena mucho en lo íntimo de mi corazón para que yo pudiera desoirla. Héme aquí entre vosotros pronto á emplear todas las fuerzas de mi alma y toda la enerjía de mi voluntad en servicio de la República y en el vuestro.

Purguemos el país del monstruo que lo devora y de los vampiros que le rodean: mas no puedo aceptar el título de Regenerador con que antes de mi arribo à vuestras playas me habuais honrado. Yo tambien soñé la regeneracion de la Patria en tiempos ménos calamitosos y cuando aun me arrullaban las lisonjeras ilusiones de la juventud; pero una larga y dolorosa experiencia me ha convencido de que Dios, en los arcanos desu sabiduría, la tiene aplazada para tiempos todavia remotos. Ese nombre me impone obligaciones con que nadie, en mi concepto, puede cumplir. Limitémonos á trabajar en una obra de mera reparacion: apuntalemos, ya que no se puede mas, el edificio social que se derrumba. Lo que yo haré será rejiros, si la Nacion me cree digno en este difícil y saludabilísimo trabajo, y me daré por bien feliz, si con vuestra cooperacion y la de todos los buenos llegase á ejecutarlo. Con nuevo aliento y mayor confianza lo emprendo, ahora que en ese incomparable júbilo, esas vivas aclamaciones, ese fervoroso aplauso con que nie habéis recibido veo pruebas inequívocas de que, léjos de disminuirse, ha crecido con el tiempo el sincero amor y la ilimitada confianza con que siempre me habéis favorecido.

Arequipa 4 de Diciembre de 1856.

M. I. DE VIVANCO.

Imprenta de M. N. Madueño, administrada por Saturnino Chavez de la Rosa.

CANDIDATURA BILLINGHURST.

Al Pueblo Arequipeño

Los numerosos cablegramas recibidos por la prensa local y por personas particulares, hacen conocer que la manifestación realizada el domingo último en la capital en favor de la candidatura del eminente ciudadano Dn. Guillermo E Billinghurst, ha sido grandiosa y calificada de imponente por el mísmo presidente de la República Sr. Leguia.

En cambio, el mitin de adhesión al Sr. Aspíllaga resultó pobrísimo y desairado, pues apenas concurrieron á él 1,500 hombres.

El sentir del pueblo peruano se ha revelado, pues, avasallador en pró de la candidatura Billinghurst, la cual se impone como una necesidad y un remedio de salud pública. Ella constituye una fundada promesa de paz y progreso.

No es con mistificaciones de sufragio, ni con popularidades falsas, como debe irse al sólio presidencial, para dejar tras sí un ambiente de intran quilidad y de recelos que anulen las energias nacionales. Cuando los hombres que rigen los destinos de un pais no encarnan la voluntad de las mayorias ciudadanas, crean para su desgraciada patria una peligrosa situación de desconfianza y desprestigio. La historia del Perú está llena de estos tristes ejemplos, y el Señor Aspíllaga que no la desconoce y en quién debemos suponer sentimientos honrados y patrióticos, desistirá de sus pretensiones, como se lo aconsejan los principales órganos de la prensa de la capital, y como se lo pide la arrolladora oleada de opinión que proclama la candidatura nacional del señor Billinghurst.

Para que se conozca la importancia de la manifestación de Lima y el número considerable de ciudadanos que, dentro del marco de la ley, han solicitado de los poderes del Estado la anulación de la pantomima electoral realizada en parte, á fin de que se convoque á nuevas elecciones en las cuales pueda el pueblo peruano dar su voto, con amplias garantias, por el ilustre hombre de Estado que luchó por su patria en las batallas de San Juan y Miraflores, damos á continuación el texto del cablegrama recibido por el señor Victor Pacheco Benavides, presidente del Comité Provincial de la candidatura Billinghurst.

De Lima, á

Victor Pacheco Benavides

Arequipa.

Mas de veinticinco mil ciudadanos reunieronse hoy pidiendo nulidad de elecciones. Comicio nunca visto.

Valdelomar Secretario

Arequipa, Mayo 21 de 1912.

Tip, y Enc, «El Porvenir>—Moral 31.

IN LAUDEM ILLUST D. D. D. PETRI ANTONIJ A BARROETA. ARCHI-PRÆSULIS DIGNISSIMI LIMINI, NOVITER, QUE AD GRANATENSEM ECCLESIAM EVECTI.

ELEGIA.

NE festiva chelyn pulset nunc ulla fororum, Tristia nam nobis carmina sola placent. Si cur tot planctus, Princeps clarissime quæis, Noscitur in promptu, caufa doloris, amor. Ergo ne discedis lumen, Presul que, paterque, Et sine te, subitò turba relicta sumus? Maturate precor Cives suspiria, mæstas Per que genas, fluvijs largior imber eat. Nil opus est monitis, Urbs iam plangore resultat, Et queroulos edunt femina, vir que sonos. Quot sine te angores præsentit Lima! putabis, Capsam Pandorç, nunc peperisse mala. Conclamant inopes, pater uno diceris ore, Lux obcęcatis, pauperibus que penus. Robora sylvarum, numero, tum sidera Cœli, Sunt eleemosynis inferiora tuis. Ac

Ac vetuti peramans ut prolem nutriat ales, Sæpc fodit rostro, pectoris ima fui; Haud secus ardenti (ne desint pascua) cura, In miseras fundis cor bone pastor oves. Cordatas, sapiens, rectas, largas, que benignus; Dona coi Charites contribuere suá. Angelus és dictus non casu, cælitus almum Hoc tibi concesum nomen, et omen habes. Summa licet cupias animo vitare modesto, Te tamen ambit honos, quærie et omne decus. Huius teftis adeft Lima, et Granata recenter, Metropolis tanto utraque digna viro. Maximus emeritos sic Ferdinandus honorat, Quio exemplar certè Regibus esse potest. Æquora cum findas, optamus sint tibi mites Inbriser Hippotades, Nereidum que pater. Si sua circumagit stammatus sumina Titan Eoas lustrans, Occiduas que plagas. Quid mirum Regio reducem te Bętica cernat, Qui solis velox perbene munus agis? Te maiora vocant ( livor rumpatur iniquus) De Purpuratis ( quis neget?) unus eris. Dissita nil tellus, poterunt nil tempora longa, ( Si ulla fides vati ) ut tua facta cadant. Dum fueris sospes, mea curret tuta phafellus, Nam mihi solamen, gratus opem que feres. Vade, tui que memor chari sis semper amici, Qui meruit studium, oficium que tuum. Distrahimur fatis, iunctis sed mentibus arctius. Fędera amicitię inviolata manent. Nunc magnus rutilas, maior fulgebis in ævum, Et te perpetuò sera propago canet. RO-

ROMANZE HENDECASYLABO.

MAL se exhala del pecho, si pretende destemplado el dolor ser harmonìa; ni que luzes havrà para las Muías, quando Apolo tan lejos se retira? Que se retira Apolo dixe? presto de la pena el motivo se publica, si es, que por el de Admeto, se sigura otro Pastor, que su esplendor eclipsa.

fu efplendor eclipfa. O que poco duro Principe facro, ephemera lá edad deda alegria! porque tus grandes méritos te elevan tanto, que te perdemos yà de vifta. Pide placer tu celebrado afcetifo, à profundo pefar tu fiilta obligas Labyrintho de afedos tan confuía, que la razón en él anda perdida» otro

Paftor , que

dudas zozobrando el Pueblo, fube el clamor ala region vacia,

Entre citas

el llanto amargo que lo aumenta* prefumpeiones de Mar concibe el Rimac* y con

Común es .

la aflicción, pero los pobres natural la fientan mas adiva, es

ganándoles fiempre por la mano, piedad à fus ruegos fe anticipa.

pues tu

Llena

Llena el Cielo de perlas à los Prados, que fus Cristales aridos mendìgan; y à tu rebaño liberal socorres con limosnas que son como llovidas.

Columna de la fee, nuestro Thoribio, à Granada ilustraba; pero Lima, haviendole quitado tan gran Santo, con un Angel pagar solo podia.

La Ciudad de los Reyes con su Estrella, la primera, te diò ciertas premisas, de Astro brillantes y Purpura segura, de Granada el matiz te vaticìna.

Y que mucho consigas triumphos tales, y de immortal Laurèl la frente ciñas; si el Jupiter Hispano (como vèmos) tan benigno te influye honras, y dichas?

Vive, pues, en el templo de la Fama; y solamente nuestro amor suplìca, que los que tiene el sentimiento muertos, (ilustre Pedro) en tu memoria vivan.

Pero, yà ave de Jove generosa, el vuelo emprendes, quando el suyo humilla desmayada la pluma del Amigo, que estos poeticos rasgos te dedica.

A LIMA LIBRE Y TRIUNFANTE ODA.

Ecce ego praedico vobis libertatem, ait Dominus. Jerem. cap. 34. Et protegam civilatem istam, ut salve, eam propter me. Isai. cap. 37

¡ Qué ardiente y pura llama Baxa sin tempestad del claro cielo, Y en un momento inflama Del alma Lima el fortunado suelo ! ¡Que incendio por la tierra se introduce, La abrasa y al instante héroes produce!

¡O saludable fuego Que vida nueva das con tus ardores, Me excitas á que luego Con mi lira tribute los honores A los que en ti abrasados á la gloria En su carro conduxo la victoria !

Compatriotas valientes Que en amor de la Patria enardecidos, A bravos combatientes Solo con veros los dexais vencidos, Eternice mi musa el heroísmo De tan noble y grandioso patriotismo.

¡ O ciudad venturosa ! Cuando el mundo contemple en sus anales Tu marcha prodigiosa En tiempos tan aciagos y fatales, Atonito dirá : mano invisible Sobstuvo à Lima en pena tan terrible.

Si, dulce Patria mia: Escuchò tus clamores el Eterno: Y al ver la bastardía De tu tirano y destructor Gobierno, Decretó para siempre el exterminio De su injusto y despótico dominio.

Piérda la España, dixo, El don precioso de ese rico imperio Donde mi trono fijo : Fenesea el detestable cautiverio ; Y al reynado del ódio injusticia, Suceda el del y la justicia.

Y tú, Lima, que fuiste A mi ley obsecuente, y con paciencia Tres centurias sufriste; En prémio de tu amor y tu obediencia, La libertad recibe, y sin estragos De la guerra vé solo los amagos.

Temblad necios tiranos Qué usurpais à los pueblos sus derechos; Porque si entre sus manos Con fuerte lucha no quedáis deshechos, Los Vengará el Señor, y en un momento Seréis cual paja que disipa el viento.

De órden suya aparece El Génio protector como la aurora Que la noche esclarece, Y al sol anuncia que las nubes dora: Muda el Perú de faz, y se percibe El benéfico influjo que recibe.

Dirìgen la ardua empresa De Lima los celestes tutelares: Cual alGefe intereza, Que recordando sus nativos làres, A grandes pueblos libres los declara En fiel obsequio de su Patria cara. En fiel obsequio de su Patria cara. [*]

(*) El honorable S. D. José Bernardo Tagle y Portoçarrero, natural de Lima, marquez de Torre-Tagle, mariscal de campo de los exércitos de la Patria, fundador de la órden del Sol, consejero de estado, inspector general de cívicos y gefe de la legion Peruana. Proclamó la Independencîa en la provincia de Truxillo siendo intendente de ella. La libertad de esos pueblos fué muy ventajosa á la causa de la Patria: y á mas de este heroyco servicio, auxilió dicho señor de muchos modos al exército libertador en testimonio de su noble y generoso patriotismo. La Patria no olvidará jamas tan grandes sacrificios, y estamvará en los fastos de la Independencia del Perú el nombre de [illegible]

Así Señor renuevas Este mundo moral: cesa el desorden, Y á los justos elevas, Como en natura se conserva el órden Por esas materiales explosiones Que trastornan la faz de las naciones.

Y ¿ en tu heroyca defenza Cuantos ¡ ó Lima! se hallan empeñados ? Ninguno se dispensa: Hombres, mugeres, niños y......¡ sagrados Ministros del altar ! ¡ vírgenes santas ! Pedid á Dios que cesen penas tantas.

El eterno decreto Sobre Lima se cumple, porque todo A Dios está sujeto. Mas ¡ de que raro y admirable modo ! Los adversarios temerosos huyen, Y con su misma fuga se destruyen.

Y tú fuerte baluarte Llave de Lima defensor del puerto, Y prodigio del arte; Desamparado estás: tu riesgo es cierto : Y pues hambre rabiosa te desola, De la Patria el pendón pronto enarbola.

¡ Victoria sin combate ! Canta ¡ ó Lima! tu triunfo : por el mundo Tu gloria se dilate. Y á SAN MARTIN, el Génio mas profundo, Dale con tierno amor la honra debida, Porque te ha dado libertad y vida. J.M. V.

VIVA LA PATRIA.

DESPEDIDA ULTIMA DE LOS JEFES, EMPLEADOS,

Y COMERCIANTES, CHAPETONES, EN=

DECIMAS.

A Dios, ya llegó el momento De la triste despedida: Ya en la America querida No hallan nuestros pies asiento: Nosotros el instrumento Fuimos del [m?l] que lloramos Luego ¿ De quien nos quejamos? Mal haya nuestra ambicion Origen de la aniccion Que en el dia lamentamos.

SE DESPIDE UN GENERAL. Ayer con este baston Y mi verstido hordado, De todos fui respétado Con servil humillacion: Mas mi Española hinchazón Hóy se mira despreciada, Y de esta, CANALLA alzada Sufro el ultraje mayor: ¿Y que el que ayer fué Señor Se mire hóy ménos que nada?

SE DESPIDE UN TOGADO. Yo que há póco organo fui De la SOBERANA LEY, Y en nombrando ESPANA Y REY Á todas temblar los vÍ: Mas que humano me adverti, Lleno de honrra, y de dineró Dando justicia al que quiero, Ó al que mas me regalaba: Ayer nadie me igualaba, Y hoy soi, aun menos que sero.

UN ADMINISTRADOR DE Rentas. Yo Administrador de rentas Que á todos los despreciaba, Y haciendo cuentos, y cuentas, Con la mitad me quedaba: Yo que siempre me jactaba De abatir, y de ultrajar, Y si es posible acabar Con el que era AMERICANO, ¿Coa el sombrero en la mano Hé de llagarlo [a] hablar?

UN OFICIAL REAL. Yo oficial real, que pagaba Á todo ESPAÑOL corriendo, Y al que no, lo iba aburriendo Mientras que no me obsequiaba: Que contra todos rajaba No cesando de hacer mal, Por el odio natural Que tengo á estos habitantes, ¿Tengo de ver que triunfantes Rien mi suerte fatal?

UN MINERO. En mis minas absoluto, De los INDIOS disponia, Y el pecuniario tributo Por su medio conseguia: Con indolencia advertia Que el trabajo los mataba, Pero en ello me gozaba, Mas ya todo se acabó: ¿Y que debo dejar yo Aquello que mas amaba?

UN HACENDADO. En mi hacienda soberno Despotico disponia, Y á mis plantas se ofrecia EL INDIO, y el AFRICANO: Lo dispuesto por mi mano Se cumplia, aunque mandase Que en el castigo espirase El miserable sirviente; ¿Y que hasta esta triste gente Contra mi se revelase?

Y no es mi mayor pesar El mirme en tal estado, Sino es que por fuerza ó grado De aqui tengo que marchar: AMERICA ¿ hé desár Tu deliciosa mansion? Se me arranca el corazon.... Mas ya viene el Comisario, No quiero ser temerario, Me marcho sin dilacion.

UN NABIERO. De tres Fragatas soi dueño; Mas no vendrán á este puerto, Pues ya nuestro mal es cierto Aunque nós parezca sueño :