BSM_EL_CONSTITUCIONAL_1883

LAS OPERACIONES DEL EJÉRCITO FRONTERAS DE MENDOZA, (De La Tribuna Nacional) La segunda División á las órdenes del Jeneral Villegas, lleva á cabo con brillante éxito la expedición sobre las mismas tribus de indios, batiéndolos entre las simas de la cordillera. La primera Brigada al mando del Coronel Ortega, ha barrido las indiadas desde las márgenes del Alumine hasta las cumbres mismas, donde el Comandante Ruibal recibe cinco heridas, dos de bala i tres de lanza, felizmente sin gravedad i como indelebles señales de ese coraje de que ha dado tantas pruebas, colocándolo por meritorias acciones en su rápida i lucida vida militar, á la altura de los más distinguidos de nuestros jefes de caballería. Aun nos faltan noticias de tres de las partidas de esta Brigada que han penetrado entre los cajones de la Cordillera, persiguiéndolos indios dispersos, entre los cuales se encuentra el famoso Namuncurá, aun cuando todos sus hombres de armas han caído muertos ó prisioneros i han sido aprehendidas sus familias i chusmas. Al dar la noticia de la heroica accion del Comandante Ruibal que se aventuró entre las breñas i matorrales de la Cordillera, sin senda i sin baqueanos, i sin más indicios que el rastro por donde huían los enemigos, omitimos mencionar las heridas por que no quisimos llevar la alarma á su jóven esposa, hasta que no supiéramos que había tenido noticias directas de su bizarro esposo, que recién casado marchó á cumplir su deber i á conquistar nuevos laureles que lo recomendasen á la consideración del Gobierno i de la Nación. La segunda Brigada á las órdenes del Coronel Godoi no ha obtenido menores resultados, como nos lo indica su parte confidencial; i del mismo parte se de-

duce que la tercera Brigada á las órdenes del Comandante Palacio, ha obtenido también sus triunfos, de que aun no tenemos noticias por las grandes distancias á que sus fuerzas operan, pero que el Jeneral Villegas anuncia con la seguridad de que ejecutan su noda conciencia un plan militar perfectamente concebido. Estas operaciones que ilustra el Ministro de la Guerra en su última Memoria, para cuya ejecución solicitó del Congreso un crédito extraordinario, que nos ha votado i que á pesar de eso se llevan á cabo, con un espléndido éxito, vana complementar la gran obra de la completa civilización iniciada en las rejonas delactual Presidente de la República. Las rejiones más pintorescas i fecundas de nuestros extensos territorios australes, van á ser entregadas perfectamente aseguradas a la inmigración extranjera. Las industrias de la civilización, que pronto las transformarán en secciones florecientes engrandecidores de la Nación. El ejército arjentino, como decía el Ministro de la Guerra en la Memoria, rinde al país un progreso i en gloria, más que lo que le cuesta. No se esteriliza en los campamentos. La campaña sobre la cordillera para fijar allí la frontera, que debió ser internacional hace mucho tiempo, es de gran mérito para las fuerzas que la ejecutan i que según el Coronel Godoi, conservan en las gloriosas fatigas, su disciplina ejemplar. Conviene que recordemos los cuerpos que las componen. La primera Brigada la compone el batallón 12 i los regimientos 3 i 11, como se sabe la manda el Coronel Ortega, siendo jefe de los rejimientos los Comandantes Belisle i Nadal. La segunda á las órdenes del Coronel Godoi, jefe del rejimiento 2, se compone de este, del 5 i 2.º de infantería. La tercera á las órdenes del Comandante Palacio, la forman el 6.º de infantería, el rejimiento 7 de caballería i el escuadrón "indios Auxiliares". Se encuentran perfectamente equipadas i montadas. Un racionamiento extraordinario está á cargo de la 2.ª brigada acampada en Collon-cará. El Jeneral Villegas recorre en estos momentos los campamentos de las tres Brigadas i pronto hemos de tener noticias detalladas de las diversas expediciones parciales desprendidas de todas éstas.

{C1} Un oficial i nueve soldados ahogados Según noticias que tenemos á la vista, dice El Nacional, han perecido ahogados al pretender pasar el arroyo Picun-Leufú, el Subteniente Charples i nueve soldados del Batallón 6 de infantería de línea, que fueron destacados en persecución de unos indios que se avistaron á la 3.ª Brigada en las últimas operaciones de la expedición Villegas.

{C2} Rescate de un cautivo En Abril 4 de 1882, nuestro cónsul en Angol (Chile) obtuvo de los indios la entrega de un cautivo de apellido Laurent, i el hecho fue comunicado al Gobierno Nacional pero como de aquí no se contestase nada, repitió el Cónsul el 21 de Diciembre, su comunicación que dice como sigue: «Hace como dos años que tenía noticias de la existencia de un jóven cautivo en una reducción al Sur del Rio Cautín i aunque había hecho muchas tentativas para sacarlo, no había podido conseguirlo, hasta hoy que más afortunado i valiéndose de una persona amiga que no ha omitido gastos para secundar mis deseos, lo tengo aquí. Este jóven es de 18 á 20 años de edad, de figura i fisonomía interesante, rubio, habla poco el español i parece tener acento francés. Dice que los indios se lo llevaron de cerca de Junín en un malón i cuando él tenía, según cree, como ocho años de edad. Que su padre se llamaba Laurent ó Noran [francés]; su madre, Adela, un hermano menor, Leon i dos hermanas, Agustina i Delfina. Que estando él en la reducción de Namuncurá, su padre trató de rescatarlo ofreciendo hasta un negro por él; pero que los indios no quisieron aceptar ninguna oferta. Que su padre era pudiente; i tenía animales vacunos de su propiedad, por miles. Con estos datos creo que sería

fácil encontrar los padres de este infeliz, que sin duda lo lloran como perdido para siempre. Rogando á U. S. se sirva darme instrucciones sobre qué pasos debo dar para encaminarlo al lugar de la residencia de sus padres, soi de U. S. atento i S. S.— Manuel Bunster, Cónsul Argentino en Angol. El jóven Laurent permanece aun al cuidado del Sr. Bunster i á este ó al Sr. Arroyo en Santiago de Chile debe dirigirse la familia, si desea evitarse la tramitación por demás morosa de nuestra administración nacional.

Combate sangriente con los indios—Un combate sangriento ha tenido lugar recientemente al pié de los Andes, entre soldados del 11 de caballería i un grupo de indios. Los soldados pertenecen á la división que opera á las órdenes del Coronel Ortega. El Comandante D. Manuel Ruibal, 2.º Jefe de ese Cuerpo, con cinco soldados i el Subteniente O'Donell se habían internado bastante explorando el terreno para emprender en seguida una batida seria. Todos ellos iban bien montados i perfectamente armados— Los soldados llevaban carabinas remington i sables. Cerca de un arroyo que hallaron al paso se detuvieron un rato buscando algún paso para vadearlo. Cuando lo pasaron penetraron á un espeso cañaveral. Los expedicionarios iban en fila, uno tras otro, el Comandante Ruibal adelante. De pronto oyeron un alarido espantoso. Un grupo compuesto como de sesenta indios armados con flechas, hondas i algunos con armas de fuego, bien emboscados, habían hecho la descarga. Los soldados echaron pié á tierra i se dispusieron á la defensa, haciendo certeros tiros. La lucha no duró mucho. El Comandante Ruibal quedó gravemente herido según unos, levemente según otros, de un balazo i un lanzazo; dos soldados también quedaron mal heridos. Una retirada oportuna de ambas partes dió fin al combate, en que los soldados arjentinos se vieron tan espuestos i pelearon tan valientemente.